Hay sanidad para el corazón quebrantado
Introducción: La palabra de Dios enseña contundentemente que él es nuestro sanador. Así se manifestó en el Antiguo Testamento, y se hizo mucho más evidente en el ministerio terrenal de Jesucristo el Señor, y al partir delegó su poder y autoridad en la iglesia. Entonces la iglesia de Cristo se convierte en un instrumento de Dios para traer sanidad y libertad de toda opresión demoníaca . Por eso el Señor envió al Espíritu Santo, porque la unción pudre el yugo y quebranta la aflicción causada por el reino de las tinieblas. Veamos este interesante tema