El plan de Dios es más fuerte que nosotros
Introducción: Nuestra
vida no es un accidente, ni fue una casualidad nuestro nacimiento, somos un
plan celestial. El éxito del ser humano es acercarse a Dios por medio de
Jesucristo, conocer su razón de ser aquí en la tierra y alcanzar aquello para
lo cual fue creado por el Señor…
Dios te fortalece para perseverar y vencer
Introducción: Quizá ante
los grandes obstáculos nos hemos desanimado o tal vez hasta hemos pensado en
renunciar, es allí cuando debemos recordar que Dios nos ha prometido su ayuda y
compañía en todo tiempo. Más bien debemos tomar fuerzas en Dios y perseverar,
solo los que perseveran ven las promesas divinas hechas realidad…
Jesucristo nos libra de la muerte eterna
Introducción: No
podemos permitir que los afanes de este mundo, ni la indiferencia apaguen
nuestra gratitud eterna a Jesucristo por haber dado su vida por nosotros en el
horrible sacrificio de la cruz. Cada día debemos levantar nuestra sincera
oración a Dios y darle gracias por la vida de su Hijo y por habernos librado de
la muerte eterna…
Jesucristo es nuestra esperanza
Introducción: Cuando vivimos sin
Cristo nuestra vida experimenta profundos vacíos y heridas, pues no sabemos de
dónde venimos ni adónde vamos, y los resultados de nuestras pasiones nos dejan
dolores y fracasos.
Sólo cuando nos acercamos a Jesús
nuestra vida experimenta un verdadero cambio. Debemos tener claro que el Señor
no sólo es nuestra esperanza y fortaleza aquí en la tierra, sino que nos libra
de la condenación eterna...
Qué debo hacer para ser bendecido
Introducción:
Sabemos que la Biblia contiene miles de promesas de bendición, sabemos también
que en Cristo hemos sido bendecidos.
Sin embargo vemos en muchas ocasiones que
aquellas bendiciones no se manifiestan en nuestra vida normal, y seguramente
las pedimos en oración pero aun así no vemos la respuesta. Veamos lo que hoy la
palabra de Dios nos enseña al respecto…
No dejes de luchar, Dios está contigo
Introducción: Muchas
veces los problemas o las dificultades producen un
desgaste en el creyente, asunto que termina afectando la fe y la comunión con
Dios. Esto permite que la angustia tome mayor fuerza en el corazón y pueden
tomarse malas decisiones.
Lo que nosotros debemos hacer es acudir a la
presencia de Dios, fortalecernos en él y continuar avanzando sabiendo que mayor
es su poder. No debemos rendirnos o huir, Dios está con nosotros y nos
ayuda…
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