Dios es tu escudo Génesis 15:1 “Después de estas cosas vino la palabra de Jehová a Abram en visión, diciendo: No temas, yo soy tu escudo, y tu galardón será sobremanera grande”. En este versículo la frase “Después de estas cosas”, no hacen mirar hacia atrás, ¿Qué había sucedido? En el capítulo anterior Abram había enfrentado a quienes habían secuestrado a su sobrino Lot, familia y bienes. A pesar de que la batalla había sido intensa, Dios le da la victoria sobre sus enemigos, que eran cuatro reyes cananeos. Vemos que el Señor habla a Abram y lo primero que le dice es: “No temas”. Esta frase la usa Dios frecuentemente para hablar a sus hijos y siervos, por ejemplo, a Isaías, Jeremías, Josué, Gedeón, a Pablo el apóstol, y hoy a nosotros. Aquí se lo dice a Abram, pues seguramente temía de las consecuencias de los reyes cananeos que había enfrentado, o temía sobre su futuro, o quedarse sin hijo (como podemos ver en Génesis 15:2-3), pero Dios que conoce los corazones...