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Cristo nos libera de toda aflicción

Sermón: Cristo nos libera de toda aflicción.  

 

 

 

No podemos negarlo, la opresión, aflicción o cautiverio espiritual es real; tan real como el poder de nuestro Señor Jesucristo para liberar y restaurar al ser humano. Con toda razón la Biblia nos dice: “Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo”, Evangelio según san 1ª Juan 3:8. 

1) Jesucristo poderoso libertador. 

Los evangelios nos enseñan que en los días en que el Señor desarrolló su ministerio en la tierra, liberar a los cautivos fue una labor constante, y él enseñó que ese era su propósito:   

Nos enseña el Evangelio de Lucas 4:16-19 que el Señor  “Vino a Nazaret… y en el día de reposo entró en la sinagoga… y se levantó a leer, y halló el lugar donde estaba escrito: 

El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; a pregonar libertad a los cautivos, y vista a los ciegos; a poner en libertad a los oprimidos; a predicar el año agradable del Señor”. 

Al leer los evangelios, observamos que el Señor Jesús desarrolló un fuerte ministerio de liberación. Por ejemplo nos dice Mateo 4:24 “Y le trajeron todos los que tenían dolencias, diversas enfermedades y tormentos, los endemoniados, lunáticos y paralíticos; y los sanó”. 

Jesús visitaba aldeas y ciudades llevando su mensaje, sanando a los enfermos y echando fuera demonios. No sólo revelaba su voluntad, sino que dejaba el ejemplo y modelo para su iglesia.  

 

 

 

2) La voluntad de Dios es la libertad para los cautivos y oprimidos. 

En el pasaje anterior de Lucas 4:16-19, la expresión: “A pregonar libertad para los cautivos”, desde las palabras griegas utilizadas nos plantea la idea de publicar o dar a conocer la libertad para alguien que ha sido capturado o que es prisionero de una batalla (por supuesto, una batalla espiritual, que aunque sea ignorada o desconocida, es real). 

En algún momento de la vida de la persona, ocurrió un conflicto (o trauma) donde su corazón fue lastimado por el enemigo (hablamos de cosas como heridas del corazón, abusos, rechazo, entre otras cosas), y como resultado su vida o alguna área de su alma quedo cautiva o incapacitada, por el miedo o el dolor.   

Podemos considerar como ejemplo, el caso de un(a) menor que recibió abuso de sus padres, y esto generó un resentimiento en la niñez; y por tanto, surge un gran muro en la relación padres e hijo(a) en la adultez; finalmente esto, afecta también la relación con Dios como Padre.   

La frase del pasaje bíblico: “Poner en libertad a los oprimidos” desde el idioma original bíblico nos enseña la voluntad de Dios para devolver o restaurar la libertad (esto es: soltar, perdonar, despedir), de quien ha sido golpeado, herido, maltratado, o quebrantado por las heridas o calamidades de la vida. 

Es una expresión, que muestra a aquella persona que está bajo un yugo o manto de tristeza, miedo, dolor, decepción, frustración o caídas emocionales y/o materiales. Por eso, una evidencia del cautiverio espiritual se puede ver cuando la persona sufre continuas depresiones y una visión caótica de la vida.

 

 

 

3) Por la fe en la gracia de Cristo, tenemos libertad y salvación. 

Como nos enseña el texto bíblico en Lucas 4, el Señor Jesús vino “A predicar el año agradable del Señor”, se destaca la frase: “el año agradable”; pues, este año hace referencia al año jubilar o del jubileo, donde se perdonaban las deudas y eran liberados los esclavos, es un tiempo de perdón y liberación.   

“El año agradable” es aquel tiempo en el que el Señor Jesús anunció y hoy día sigue anunciando, el tiempo de gracia, de perdón, de libertad y restauración, pues en Cristo hay restauración, liberación y salvación. 

Conclusión: A través de la palabra de Dios el Señor expresa su voluntad para la humanidad; es decir, Dios quiere la libertad, restauración y vida para todas las personas. Sólo requiere que nos acerquemos a Jesucristo, reconociendo nuestra condición y necesidad. Él es el camino, la verdad y la vida. 

Escrito por Pastor Gonzalo Sanabria. 

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2 Comments:

  1. Bendiciones la cita de Mateo,4:4--es errada deveria de decir Mateo,4:24--que es lo correcto....Dios le Bendiga en gran manera...

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