El perfecto gobierno de Jesucristo


El milenio o gobierno de Jesucristo por mil años sobre la tierra. 

1) La definición del término “Milenio”:

Este es un período de mil años bajo el gobierno del Señor Jesucristo. Que en términos generales empiezan con la segunda venida del Señor Jesús, y concluye cuando el cielo y la tierra actuales pasarán.



2) Características del milenio:

Es un gobierno en el que el Señor Jesucristo es la cabeza y jefe del planeta. Apocalipsis 20:4 “Y vi tronos, y se sentaron sobre ellos los que recibieron facultad para juzgar; y vi las almas de los decapitados por causa del testimonio de Jesús y por la palabra de Dios, los que no habían adorado a la bestia ni a su imagen, y que no recibieron la marca en sus frentes y ni en sus manos; y vivieron y reinaron con Cristo mil años”.

El diablo estará atado e impedido por este período de mil años. También participarán de este gobierno aquellos que fueron decapitados durante la gran tribulación por su fe en Jesucristo. Nos enseña la Biblia que junto al Señor Jesús estará también la iglesia, Apocalipsis 5:9-10.

Considerando Apocalipsis 20:5, podemos ver a la luz de la Biblia el orden de las resurrecciones es:

Jesucristo (quien es la primicia de la resurrección).
Los creyentes (es decir la iglesia y los mártires de la gran tribulación), “esta es la primera resurrección”.
Los impíos (comparecerán para condenación eterna, y es llamada la segunda muerte, Apocalipsis 20:6).

El milenio es un gobierno de justicia, gozo, paz y prosperidad, Isaías 2:1-4; 11:1-9. Será Jerusalén el centro de adoración y gobierno mundial, Zacarías 14: 16-19. Durante aquel tiempo muchos seres humanos van a nacer.

Al final, Satanás será desatado nos enseña la Escritura: Apocalipsis 20:7. Él usará su poder engañoso sobre las naciones, Apocalipsis 20:8. Reunirá los ejércitos de las naciones para marchar a la batalla final (Gog y Magog).

Aquellos ejércitos dirigidos por satanás subirán contra Jerusalén y serán destruidos por fuego, Apocalipsis 20:9. También sucederá la condenación eterna de Satanás: Apocalipsis 20:10.

El lago de fuego es una región de tormento eterno, es el destino final del diablo y sus ángeles, la bestia, el falso profeta, la muerte, el Hades y todo ser cuyo nombre no está escrito en el libro de la vida, (Apocalipsis 20:14-15; 19:20; Mateo 25:41).



3) El milenio termina con el evento del juicio ante el gran trono blanco. 

En este juicio participarán todos los muertos impíos, Apocalipsis 20:11-12a.

Hablamos de todos aquellos que en la tierra vivieron sin temor del Señor, y rechazaron la gracia en Cristo Jesús, 2 Pedro 2:4-9 (estos son aquellos desde los ángeles que están prisioneros, la generación antediluviana, los habitantes de Sodoma y Gomorra, y todos los injustos hasta nuestros tiempos).

Nos enseña la Escritura que los libros serán abiertos, Apocalipsis 20:12b. La sentencia final es la muerte segunda (es decir la condenación eterna), Apocalipsis 20:13-15.

La muerte segunda consiste entonces en ser lanzados a éste lago de fuego para siempre, donde el fuego es alimentado por el azufre eterno. Es el destino final y para siempre de todos aquellos que no aceptaron la gracia en Cristo Jesús.



Escrito por Pastor Gonzalo Sanabria.

Te invito a a escuchar la prédica: Dios restaura todas las cosas.

.

Comentarios

  1. Amén. Me ha gustado mucho la claridad en la explicación del estudio, porque el libro de Apocalipsis me cuesta entenderlo y agradezco mucho su explicación de la palabra.
    Yo quiero compartir el versículo :
    No temas; yo soy el primero y el último; y el que vivo, y estuve muerto; mas he aquí que vivo por los siglos de los siglos, amén. Y tengo las llaves de la muerte y del Hades.
    Apocalipsis 1:17-18

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Dios te bendiga Sara. Muchas gracias por tu valioso comentario y aporte. Bendiciones.

      Borrar
  2. Dios le bendiga, y gracias por tremenda reflexion..amen

    ResponderBorrar

Publicar un comentario

Entradas Destacadas

LOS NUEVE DONES DEL ESPÍRITU SANTO

Sermones para predicar

LOS SÍMBOLOS DEL ESPÍRITU SANTO Y SU SIGNIFICADO