Condenación de la gran ramera y caída de Babilonia | Estudios y Sermones Condenación de la gran ramera y caída de Babilonia - Estudios y Sermones

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Condenación de la gran ramera y caída de Babilonia

Condenación de la gran ramera y la caída de Babilonia, Apocalipsis 17 y 18
Apocalipsis 17-18. Condenación de la gran ramera y la caída de Babilonia. Un interesante estudio bíblico de Apocalipsis 17 y 18 que nos enseña la grandeza, poder y soberanía del Señor, quien cumple su palabra y establece su voluntad sobre sus enemigos. Dios es siempre vencedor... 


Condenación de la gran ramera.

Es importante recordar que Babilonia fue una ciudad literal que existió junto al Río Eufrates, fue la cuna de la civilización (Génesis 11:1-10). Después fue la capital del imperio que sometió cruelmente a Judá. En la Biblia Babilonia representa maldad, ocultismo, idolatría organizada, lujuria, blasfemia y codicia. Veamos al detalle lo que Apocalipsis 17 nos enseña:   

1) La gran ramera, Apocalipsis 17:1-2.

“Vino entonces uno de los siete ángeles que tenían las siete copas, y habló conmigo diciéndome: Ven acá, y te mostraré las sentencia contra la gran ramera, la que está sentada sobre muchas aguas; con la cual han fornicado los reyes de la tierra, y los moradores de la tierra se han embriagado con le vino de su fornicación”.

La sentencia contra la gran ramera ha sido establecida desde hace mucho tiempo, el contexto nos enseña que esta gran ramera es Babilonia, que como sistema religioso existió antes del cristianismo.   

La religión babilónica fue establecida por Semiramis, esposa de Nimrod, bisnieto de Noé. Ella era sacerdotisa de los ídolos más antiguos, dio a luz un hijo que llamó Tammuz, considerado salvador, y Baal llegó ser el nombre cananeo para Tammuz.

“Sentada sobre muchas aguas” quiere decir que dirige o tiene autoridad sobre muchas naciones, es una religión universal, internacional. Es la unidad idólatra de todas las falsas confesiones y religiones del mundo. Es la falsa religión que dominará al mundo en la gran tribulación.

El mundo entero, reyes, presidentes, ciudadanos, ricos y pobres, hombres y mujeres, se han embriagado con el vino de su inmoralidad, idolatría y desorden, y esto precisamente hace que cubra a todo el mundo sin excepción.         



2) Juan describe ahora lo que vio, Apocalipsis 17:3-6.

“Y me llevó en el Espíritu al desierto; y vi a una mujer sentada sobre una bestia escarlata llena de nombres de blasfemia, que tenía siete cabezas y diez cuernos. Y la mujer estaba vestida de púrpura y escarlata, y adornada de oro, de piedras preciosas y de perlas, y tenía en la mano un cáliz de oro lleno de abominaciones y de la inmundicia de su fornicación…” Apocalipsis 17:3-4.

Juan es llevado por el Espíritu Santo al desierto para ver allí la sentencia de la gran ramera. La mujer cabalgaba sobre una bestia escarlata, esta bestia está revelada en Apocalipsis 13:1 (una bestia con siete cabezas y diez cuernos), es el Anticristo, quien llegará al poder mundial mediante el engaño (es el imperio romano revivido). Entonces la mujer estará firme sobre el poder mundial del Anticristo.

La mujer está vestida con elementos que hacen referencia a la lujuria, al desorden, al gobierno y a la impureza. Por eso la púrpura y escarlata (colores de esplendor), el brillo del oro y de las piedras preciosas (que en este caso no solo hablan de su ego, sino de su poder seductor).

En su mano una copa llena de abominación, inmundicia e idolatría. La mujer con esta copa embriaga y ofrece a sus seguidores la mentira del disfrute mundano y la supuesta aceptación de Dios.     

Condenación de la gran ramera y la caída de Babilonia, Apocalipsis 17 y 18
(Versículo cinco). En su frente un nombre escrito: “Babilonia la grande, la madre de las rameras y de las abominaciones de la tierra”. Con frecuencia las prostitutas romanas usaban una cinta en su cabeza con sus nombres escritos en ésta, y así eran reconocidas y recordadas más fácilmente.  

“Babilonia la grande” su origen es Babel (según nos enseña Génesis once) representa la falsa religión, todas las practicas ocultistas (brujería, hechicería, astrología, santería, etc). La grande y la madre, no sólo indica la que ha dado a luz la falsa religión a lo largo de la historia, sino la unidad que tendrá al final de los tiempos a la par del Anticristo.

Hablamos de aquel movimiento religioso global de diferentes cultos de todas las naciones del mundo (por eso ecuménico), unidos para adorar su “dios” desechando la verdad de Dios y su palabra. “Madre de las rameras y de las abominaciones” quiere decir: fuente de toda idolatría y de todo adulterio espiritual.     

El versículo seis nos dice que aquella mujer “está ebria de la sangre de los santos y de los mártires de Jesús”, es decir, este sistema no sólo ha perseguido a los fieles de la verdadera iglesia de Jesucristo, sino que les ha dado muerte y celebra el derramamiento de su sangre.  

Juan se asombra en gran manera, pues ve a una iglesia falsa que persigue con gran sed la sangre de los santos. La historia nos muestra que la peor enemiga de la iglesia verdadera es la iglesia falsa. En nombre de la iglesia (y aún en nombre de Dios) se han hecho las más crueles y recias persecuciones contra el pueblo cristiano.

Miles y miles de creyentes en Jesucristo han sido perseguidos, asesinados y quemados; y la peor persecución se vivirá en tiempos del Anticristo, pues aunque inicialmente la mujer se apoya en la bestia (pues la mujer está sentada sobre la bestia), el Anticristo se volverá contra ella, a los tres años y medio, cuando se convierte en un cruel y severo dictador.      

(Te invito a leer: Dios restaura lo que pasó.).


3) El ángel explica a Juan la visión, Apocalipsis 17:7-10.

“Y el ángel me dijo: ¿Por qué te asombras? Yo te diré el misterio de la mujer, y de la bestia que la trae, la cual tiene las siete cabezas y los diez cuernos. La bestia que has visto, era, y no es; y está para subir del abismo e ir a perdición; y los moradores de la tierra, aquellos cuyos nombres no están escritos desde la fundación del mundo en el libro de la vida…” Apocalipsis 17:7-8.

El ángel se enfoca en la bestia, parecía inicialmente que la mujer gobernaba a la bestia, pero es éste quien termina usándola para sus planes.

El versículo ocho hace referencia al imperio romano que existió en el pasado (“era”) pero fue destruido, y no existió más como imperio mundial, pero “está para subir del abismo” es decir se levantará de nuevo pero con el poder del abismo, con el poder del diablo, e irá a destrucción (es decir, aquel imperio del Anticristo será destruido).

El poder con el que se levantará nuevamente este reino impresionará a los moradores de la tierra, aquellos cuyos nombres no estaban escritos en el libro de la vida.

El versículo nueve nos dice que la mujer (la Babilonia religiosa) se sienta sobre siete montes (ya que la Roma antigua se conoce como la ciudad de las siete colinas, muchos concluyen aquí que la sede del sistema religioso mundial será Roma).

Sin embargo. La misma Escritura, nos dice en estos versículos (nuevo y diez): “Las siete cabezas son siete montes… y son siete reyes”. En la Biblia muchas veces los montes representan poderes y gobiernos, entonces estos siete montes son siete reyes (presidentes, reinos, gobernantes, etc).

La expresión: “Cinco de ellos han caído, uno es y el otro aún no ha venido” es una expresión de difícil interpretación. Por eso algunos enseñan que se refiere a cinco emperadores que para la época de Juan ya habían muerto; uno era, refiriéndose al actual en su tiempo: Domiciano; y el que aún no había venido, refiriéndose al Anticristo.

Otros enseñan que aquí se hace referencia a siete imperios, cinco de ellos ya han caído: Egipto, Asiria, Babilonia, Persia y Grecia. Uno era en el tiempo de Juan: el Imperio Romano, y otro aún no había venido refiriéndose al Renovado Imperio Romano (o gobierno del Anticristo), y este último es necesario que dure breve tiempo. 



4) El octavo rey es el Anticristo, Apocalipsis 17:11-14.

“La bestia que era, y no es, es también el octavo; y es de entre los siete, y va a la perdición. Y los diez cuernos que has visto, son diez reyes, que aún no han recibido reino; pero por una hora recibirán autoridad como reyes juntamente con la bestia. Estos tienen un mismo propósito, y entregarán su poder y autoridad a la bestia…” Apocalipsis 17:11-13.

Nos dice la Escritura que la bestia es el octavo rey y va a la perdición, entonces nos recuerda la Biblia que el Anticristo será lanzado finalmente al lago que arde con fuego y azufre por la eternidad. 

Los versículos diez al catorce nos muestran a diez reyes aliados del Anticristo. Vemos entonces una unión o confederación de diez naciones que reinarán con la bestia y su propósito es el mismo.

Estos diez presidentes o reyes entregarán voluntariamente su poder y autoridad a la bestia, quedando el Anticristo con todo el poder para hacer según su voluntad.     

Como podemos ver en el versículo catorce estas naciones unirán sus ejércitos para hacer guerra contra el Señor Jesucristo al final de la gran tribulación. El Señor de señores y Rey de reyes vencerá.      

Condenación de la gran ramera y la caída de Babilonia, Apocalipsis 17 y 18
  5) Los aliados del Anticristo destruirán a la gran ramera, Apocalipsis 17:15-18.

“Me dijo también: las aguas que has visto donde la ramera se sienta, son pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas. Y los diez cuernos que viste en la bestia, éstos aborrecerán a la ramera, y la dejarán desolada y desnuda; y devoraran sus carnes, y la quemaran con fuego; porque Dios ha puesto en sus corazones el ejecutar lo que él quiso…”, Apocalipsis 17:15-17.

En el versículo quince se le enseña al apóstol Juan que las muchas aguas en donde la ramera se sienta son pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas, es decir grandes multitudes de habitantes de todas las naciones de la tierra serán cobijados por la falsa y única religión mundial.     

El versículo dieciséis nos describe la violencia de los países aliados contra la gran ramera, evento que probablemente ocurrirá en la  mitad de la tribulación, cuando la bestia o Anticristo afirme que él es Dios y exija adoración.     

Con todo el poder en sus manos el Anticristo no necesitará más la ayuda de la Babilonia religiosa, y actuará con soberbia y crueldad exigiendo su adoración o la muerte de quien no le adore.

Según el versículo diecisiete ha sido Dios mismo quien puso en los corazones de los reyes aliados de aquella época destruir a la gran ramera, así como ha establecido que estos reyes le darán todo poder a la bestia, hasta que se cumplan todas las palabras de Dios.

(Versículo dieciocho) En este caso la gran ciudad es Babilonia como sistema religioso que gobierna sobre los reyes de la tierra.    

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La caída de Babilonia.

En estos dos capítulos (Apocalipsis 17 y 18) la Biblia nos enseña dos aspectos diferentes de la misma Babilonia, uno religioso y otro comercial o material.    

1) Anuncio de la destrucción de la Babilonia política y económica, Apocalipsis 18:1-3.  

“Después de esto vi a otro ángel descender del cielo con gran poder; y la tierra fue alumbrada con su gloria. Y clamó con voz potente, diciendo: Ha caído, ha caído la gran Babilonia, y se ha hecho habitación de demonios y guarida de todo espíritu inmundo, y albergue de toda ave inmunda y aborrecible…” Apocalipsis 18:1-2.

Este ángel que desciende del cielo es portador de la gloria de Dios, y es tal el resplandor que alumbra la tierra, también se nos dice que viene con gran poder. Es sin duda, un ángel de categoría especial.    

Este ángel a gran voz anuncia la caída de la gran Babilonia, la expresión “se ha hecho habitación de demonios, de todo espíritu inmundo y de toda ave inmunda y aborrecible” indica que el centro político y comercial del mundo (Babilonia) será destruido y más bien se tornará en una morada para los poderes demoniacos.

Las grandes empresas y los grandes capitales que abusaron de los más necesitados, que abusaron de su poder y afligieron a multitudes, que engañaron sin importar la palabra de Dios, y explotaron la  naturaleza sin medida ni pudor, un día pagarán todas sus obras y toda conducta deshonesta, y el dinero simplemente será destruido.     

El pecado de Babilonia no sólo es la idolatría y las prácticas hechiceras, sino también el orgullo, la codicia y las riquezas mal adquiridas y no rendidas a Dios. 

Condenación de la gran ramera y la caída de Babilonia, Apocalipsis 17 y 18
2) El pueblo de Dios es llamado a salir de ella, Apocalipsis 18:4-5.

“Y oí otra voz del cielo, que decía: Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas: porque sus pecados han legado hasta el cielo; y Dios se ha acordado de sus maldades”.

Como pueblo de Dios debemos apartarnos por supuesto de la Babilonia religiosa, pero sin duda la Babilonia comercial puede atrapar al cristiano con avaricia y codicia. Por eso debemos tener presente las palabras de Jesús: “Más buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y las demás cosas vendrán por añadidura”.   

Este llamado divino de apartarse del sistema babilónico es frecuente al pueblo de Dios a lo largo de la Escritura (tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento).

Recordemos que Lot estaba en la ciudad que sería destruida por su maldad, de igual manera el cristiano debe vivir consciente de la venida del Señor y con discernimiento espiritual para evitar el juicio divino.      

Es interesante que en el versículo cinco se usa la expresión: “sus pecados han llegado hasta el cielo”, pues nos recuerda la torre de Babel cuyo objetivo era llegar al cielo. Los pecados de Babilonia se han acumulado como una torre hasta llegar al cielo. 

(Te invito a leer: Persevera, tu milagro está cerca.).


3) Como castigo Babilonia recibirá el doble del sufrimiento y miseria que provocó, Apocalipsis 18:6-8.

“Dadle a ella como ella os ha dado, y pagadle dobles según sus obras; en el cáliz en que ella preparó bebida, preparadle a ella el doble. Cuando ella se ha glorificado y ha vivido en deleites, tanto dadle de tormento y llanto; porque dice en su corazón: Yo estoy sentada como reina, y no soy viuda, y no veré llanto; por lo cual en un solo día vendrán sus plagas; muerte, llanto y hambre, y será quemada con fuego…”.

El versículo seis inicia con la expresión “Dadle a ella” y aquí la palabra griega usada para “dadle” es “apodidomi” que significa: pagar una deuda, o regresar lo que se debe. Es decir, Babilonia recibirá el pago de su maldad, la retribución de su pecado.

Además se nos dice “pagadle el doble según sus obras” ¿por qué recibirá el doble? La Biblia nos enseña en Éxodo 22:4-9 que en los casos de robo se debía restituir devolviendo el doble. Es una referencia a la manera deshonesta como hizo su fortuna.

Las expresiones del versículo siete nos enseñan su estilo de vida: “deleites” es decir sin medida propia, ha dado rienda a suelta a sus desenfrenos; nos dice también: “se ha glorificado… sentada como reina” se ha llenado de orgullo y vanagloria, y finaliza diciendo “no veré llanto” sólo piensa en su propio bienestar, y no desea identificarse con Cristo en sus pruebas o padecimientos.

El lujo, la soberbia y la arrogancia, el pecado y el desenfreno serán características de aquel sistema. La paz temporal y la engañosa prosperidad los tendrá engañados.        

El versículo ocho nos enseña que la caída y destrucción de la Babilonia comercial será de repente y de manera total, pues dice el texto: “en un solo día… será quemada con fuego”. De pronto caerán sobre ésta Babilonia las plagas, la muerte, el llanto, el hambre y el fuego dejando una destrucción total; y todo esto sucede “porque poderoso es Dios el Señor que la juzga”.        

Condenación de la gran ramera y la caída de Babilonia, Apocalipsis 17 y 18
   4) Lamentación por la caída de Babilonia, Apocalipsis 18:9-19.

“Y los reyes de la tierra que han fornicado con ella, y con ella han vivido en deleites, llorarán y harán lamentación sobre ella, cuando vean el humo de su incendio, parándose de lejos por el temor de su tormento, diciendo: ¡Ay, ay, de la gran ciudad de Babilonia, la ciudad fuerte; porque en una hora vino tu juicio!...” Apocalipsis 18:9-10.

La ciudad grande y fuerte, la gran Babilonia cae ante el fuego del juicio de Dios, probablemente se hace referencia a la destrucción por todo el armamento de los aliados del anticristo que se han vuelto contra ella.      

Como podemos ver en la descripción se destacan los lujos, y la lamentación que se da por la caída de la gran ciudad es por el interés propio de cada uno, lloran por las riquezas que se pierden y no por arrepentirse delante de Dios, quien es el verdadero dueño del oro y de la plata. 

Las ganancias de ésta Babilonia comercial fueron obtenidas mediante el robo, el fraude, el engaño, la esclavitud, la muerte, etc, y el resultado es precisamente su destrucción total y eterna, por eso dice: “nunca más las hallarás” versículo catorce.  

5) Hay alegría en el cielo y entre los santos por la caída de Babilonia, Apocalipsis 18:20-24.

“Alégrate sobre ella, cielo, y vosotros, santos, apóstoles y profetas; porque Dios os ha hecho justicia en ella. Y un ángel poderoso tomó una piedra, como una gran piedra de molino, y la arrojó al mar, diciendo: Con el mismo ímpetu será derribada Babilonia, la gran ciudad, y nunca más será hallada…” Apocalipsis 18:20-21.

La alegría no es por la destrucción de otros, sino por la justicia que Dios ejerce, su pueblo debe alegrarse cuando el Señor hace su soberana y poderosa obra.

En el versículo veintiuno un ángel utiliza el lanzamiento de una gran piedra al mar indicando que con la misma fuerza caerá Babilonia y nunca más será. Todo el comercio y toda la industria de Babilonia desaparecerán.

Babilonia es un sistema que ha engañado al mundo con su brillo y esplendor, ha actuado como un brujo quien con sus encantamientos y hechizos fascinó a multitudes y naciones llevándolos a la muerte.    

El versículo veinticuatro “Y en ella se halló la sangre de los profetas y de los santos, y de todos los que han sido muertos en al tierra”, nos describe un crimen mayor que este sistema babilónico ha realizado: dar muerte a los profetas y a los santos de Dios, y aún de todos los que han muerto sobre la tierra. 

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Escrito por Pastor Gonzalo Sanabria. 

Condenación de la gran ramera y caída de Babilonia. Apocalipsis 17-18.

11 Comments:

  1. Gracias pastor. Por su esfuerzo y tiempo de mandar estas grandes enseñanzas, y es de gran alimento espiritual para vosotros. Dios lo bendiga hoy mañana y siempre. 🙏

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    1. Muchas gracias también a ustedes por leer estas publicaciones y por las palabras de apoyo. Dios los bendiga.

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  2. Nunca abia estudiado tan profundamente estos versículo de Apocalipsis, gracias pastor por esta enseñanza Dios lo bendiga.

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    1. Dios te bendiga y muchas gracias por dejarnos tus valiosos comentarios.

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  3. Muchisimas bendiciones, excelente estudio,,graciasss

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    1. Dios te bendiga Yriangeles, muchas gracias por dejarnos tus comentarios.

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  4. Graciss Pastor por tan valioso estudio,el apocalipsis es dificil de interpretar,Dlb y siga mostrandoles sus misterios y revelando su palabra

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    1. Muchas gracias Verofonseca por tus comentarios y apoyo. Dios bendiga tu vida y familia, y gracias por leer nuestras publicaciones.

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  5. Muchas gracias pastor. Me cuesta mucho entender Apocalipsis y ha sido de gran bendición este estudio y de gran aprendizaje. El Señor les bendiga mucho.

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    1. Muchas gracias Sara por tus palabras y comentarios, son muy valiosos para nosotros. Dios bendiga tu vida y familia.

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  6. Que buen estudio pastor,gracias por tomarse un tiempo para explicar tan difícil tema,mi Dios lo bendiga

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