Hoy tenemos vida porque Jesucristo dio la suya - Sermones cristianos
(Sermones cristianos y bosquejos). En el juicio final nos dice la Biblia que el mar, la muerte y
el Hades entregarán sus muertos, y esto será para que vayan a condenación
eterna, pero nosotros iremos a vida eterna con Cristo Jesús, fue él quien pagó
el precio de nuestros pecados para que hoy tengamos vida…
Sermón cristiano: Hoy tenemos vida porque Jesucristo dio la suya.
Apocalipsis 20:13 “Y el mar entregó
los muertos que había en él, y la muerte y el Hades entregaron los muertos que
había en ellos, y fueron juzgados cada uno según sus obras”.
Este pasaje narra un evento en el juicio final. En la Biblia estos nombres (muerte -
Hades) pueden hacer referencia a seres espirituales demoníacos (principados o
potestades) o a regiones espirituales, según el contexto. Es interesante tener
en cuenta que en la mitología griega “Hades” es el dios del inframundo.
La Biblia nos enseña en Apocalipsis 6:8 que la Muerte y el
Hades son seres que cumplen una misión destructiva, son seres con intelecto,
emociones y voluntad; y en Apocalipsis 20:13 el mar, la muerte y el Hades
actúan como seres con personalidad.
Al decir “el mar, la muerte y el
Hades entregaron los muertos que había en ellos” nos deja ver que también hace
referencia a lugares con esos nombres, lugares en donde había muchos muertos.
Recordemos aquí que la región de los
muertos en el Antiguo Testamento se le llama “Seol” (término hebreo), mientras
que en el Nuevo Testamento se le llama “Hades” (termino griego). Jesús también
dijo: “las puertas del Hades no prevalecerán contra mi iglesia” entonces el
Hades tiene puertas, porque también es un lugar.
El Hades (traducido en algunas
versiones como “infierno”) es entonces una región transitoria, pues el destino
eterno de sus ocupantes es el lago de fuego.
También podemos preguntarnos ¿desde
qué momento empezaron a acumularse personas en esos lugares o regiones
espirituales? La Biblia nos enseña en 1 Pedro 3:18-20 que allí están los
espíritus encarcelados, aquellos que desobedecieron en días de Noé mientras se
preparaba el arca, y Dios con paciencia esperaba su arrepentimiento.
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La vida es un regalo de Dios en la
tierra, en la vida tenemos la oportunidad de conocer y seguir a Cristo; nacer
de nuevo nos convierte no sólo en hijos de Dios, sino en ciudadanos del reino
celestial.
Así como en la tierra la ciudadanía
de una persona queda confirmada por su registro en los libros del país, al
nacer de nuevo en Cristo venimos a ser nación santa, linaje escogido, pueblo
adquirido por Dios.
Aquella ciudadanía queda confirmada
cuando nuestro nombre queda registrado en el libro de la vida, que es el libro
de la ciudadanía celestial y es por eso que los inscritos en este libro no irán
al lago de fuego, porque no son ciudadanos del lago de fuego, sino ciudadanos
del reino de Dios. Gracias Señor Jesucristo por habernos salvado de la
condenación eterna.
Sermones cristianos y bosquejos.
Ese amor se manifiesta plenamente entre nosotros para que en el día del juicio comparezcamos con toda confianza, porque en este mundo hemos vivido como vivió Jesús. En el amor no hay temor, sino que el amor perfecto echa fuera el temor. El que teme espera el castigo, así que no ha sido perfeccionado en el amor.
ResponderBorrar1 Juan 4:17-18
Tienes toda la razón Sara, nuestra confianza y seguridad están en Cristo Jesús. Muchas gracias por tus valiosos comentarios. Dios te bendiga.
BorrarSeguro estoy que por su sacrificio y mi confesion de que el es mi Señor y mi salvador,nunca ire a ese lugar
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