Jesucristo es Dios Todopoderoso - Estudio bíblico

Estudios bíblicos

(Sermones cristianos). Introducción: Aunque con frecuencia escribas y fariseos asediaban al Maestro para atacar su obra y su mensaje, siempre el Señor triunfó sobre ellos. Jesucristo es Dios Todopoderoso, y no hay obstáculo ni dificultad que pueda detener los propósitos del Señor…      

Estudio bíblico: Jesucristo es Dios Todopoderoso.

Lucas 5:24-26 “Pues para que sepáis que el Hijo del Hombre tiene potestad en la tierra para perdonar pecados (dijo al paralítico): A ti te digo: Levántate, toma tu lecho y vete a tu casa… y levantándose tomó su lecho y se fue a su casa, glorificando a Dios. Y todos glorificaban a Dios… diciendo: hoy hemos visto maravillas”.

Jesús está atendiendo a un paralítico que han traído delante de él para que sea sanado, y los escribas y fariseos allí presentes resisten la obra de Jesús. En primer lugar vemos que el Señor Jesús se presenta aquí como el “Hijo del Hombre”, destacando su naturaleza divina y humana, Jesús es cien por ciento Dios y cien por ciento hombre.

Precisamente desde aquella humanidad él nos comprende y nos puede ayudar, él fue tentado en todo pero sin pecado, él se identificó con nosotros.    

El Señor Jesucristo tiene potestad para perdonar pecados, porque él es Dios y además derramó su sangre en la cruz del calvario para perdón de nuestros pecados, Jesús murió en la cruz, dio su vida por la nuestra, y también al tercer día resucitó de entre los muertos, ascendió al Padre celestial y volverá por segunda vez, levantará su iglesia y establecerá su reino en la tierra.    

No sabemos cuánto tiempo estuvo aquel hombre paralítico pero el Señor le habló sacándolo de aquella situación en la que estaba y lo hizo a través de su palabra, pues le dijo: “A ti te digo: Levántate, toma tu lecho, y vete a tu casa”.

Jesucristo es Dios, es nuestro creador y conoce al detalle muy bien su creación, nuestro ser es una maravilla del universo, una parte de nuestro cuerpo puede afectarse por un golpe, por un tumor, una inflamación, una infección, o una enfermedad y aquella situación en alguna parte de nuestro ser afecta nuestra vida y funcionamiento.

También nuestras situaciones emocionales afectan nuestra salud, la falta de perdón, el resentimiento, la amargura, los pecados de los cuales no nos hemos arrepentido, momentos dolorosos que marcaron nuestro corazón, etc, por eso antes de ministrar sanidad al paralitico, Jesús le dijo: “Hombre, tus pecados te son perdonados”.    

Ante la palabra de Jesús el poder de Dios vino sobre aquel hombre, él fue perdonado, sanado y liberado. El poder del Señor vino sobre la parte de aquel hombre que había sido afectada, y en aquel mismo momento él se puso de pie y tomando su lecho salió hacia su casa y daba la gloria a Dios. Imagínate lo que pasó en aquella casa, pues poderoso es Dios para transformar nuestras crisis en grandes victorias.   

Conclusión: Acerquémonos a Dios pidiendo perdón por nuestros pecados, creyendo que su sangre nos limpia de pecado, presentemos nuestra vida y todo nuestro ser delante de Jesús, él es quien nos perdona, sana, libera. Permitamos a Dios hacer su obra en medio de nosotros. 

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Escrito por pastor Gonzalo Sanabria.            

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