Qué cosas afectan la fe

Introducción: Con frecuencia en el caminar de fe las tinieblas procuran estorbar e impedir el avance del hijo de Dios, allí es necesario proclamar y creer las poderosas promesas del Señor, pues todo aquel que en él cree nunca será avergonzado...

Sermón ¿Qué cosas afectan la fe?     

Mateo 14:28-32 “Entonces le respondió Pedro, y dijo: Señor, si eres tú, manda que yo vaya a ti sobre las aguas. Y Él dijo: Ven. Y descendiendo Pedro de la barca, caminó sobre las aguas para ir a Jesús. Pero viendo el viento fuerte, tuvo miedo; y comenzando a hundirse, dio voces, diciendo: ¡Señor, sálvame! Y al instante Jesús, extendiendo su mano, trabó de él, y le dijo: ¡Hombre de poca fe! ¿Por qué dudaste? Y cuando ellos entraron en la barca, se calmó el viento. ”

En éste pasaje bíblico y en el versículo 24 podemos identificar varios enemigos de la fe que vienen para estorbar o impedir tu avance hacia el plan de Dios:

a) Los vientos contrarios: representan la oposición, aquello que no quiere que el cristiano avance. Hablamos de cosas como el rechazo, menosprecio, burla, calumnias, envidias, etc.

b) Las grandes olas que azotan la barca: representan aquellos ataques demoniacos y dardos que el enemigo lanza contra los hijos de Dios procurando destruir la familia, la vida, los planes que el Señor pone en el corazón de sus hijos, o ataques procurando destruir el ministerio o llamado de Dios.

c) Los temores propios (el texto bíblico dice “Pedro tuvo miedo”): a veces los fracasos del pasado o heridas no sanadas reaparecen para impedir que el cristiano confié en el Señor, y dude de lo que Dios está haciendo y quiere hacer.

 

d) El miedo a lo nuevo: esto nunca antes había ocurrido, es decir nadie había caminado sobre las aguas (Dios nos sorprende con cosas nuevas). Pedro comenzó a caminar cuando Jesús le dijo: “Ven”, entonces más bien él caminaba sobre la palabra de Dios.

Pedro caminó sobre lo que Jesús dijo y mientras su fe estuvo sobre esa palabra pudo hacerlo, pero “al ver el fuerte viento” comenzó a hundirse, ya que el viento no puede verse, creo que Pedro veía el agitado y enfurecido mar, y concluyó que no era posible hacer eso y empezó a hundirse.

Cuando miramos más los problemas que a Dios, o cuando damos más valor a la adversidad que a las buenas promesas del Señor nuestros pies comienzan a hundirse.

e) No dejes de confiar en Dios: Al sentir que se hundía Pedro clamó a Dios diciendo “Señor, sálvame” y “Jesús extendiendo la mano, asió de él” el Señor conoce nuestra condición y sabe que a veces nuestro corazón tiene crisis de fe, pero él siempre está allí, con sus oídos abiertos para escuchar nuestro clamor y su mano preparada para levantar nuestro corazón cuando desfallece.            

Conclusión: Al final nos dice el versículo 32, “cuando subieron a la barca, se calmó el viento” Jesús sigue clamando tormentas, él tiene poder sobre toda circunstancia, no importa de qué tamaño son las olas y cuan fuerte es el viento contrario, Dios está de tu lado. Puedes confiar en él.

Escrito por Pastor Gonzalo Sanabria.

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Hebreos 11:6-7 “Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan. Por la fe Noé, cuando fue advertido por Dios acerca de cosas que aún no se veían, con temor preparó el arca en que su casa se salvase; y por esa fe condenó al mundo, y fue hecho heredero de la justicia que viene por la fe”.

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