El Espíritu Santo en mi Vida

Introducción: No en vano nos ha sido dado el Espíritu Santo, por eso es fundamental conocerlo y desarrollar la comunión con él, pues nos guiará a lo mejor. 

Antes de que los discípulos de Jesús comenzarán a evangelizar el mundo conocido les mandó que nos salieran de Jerusalén hasta que recibieran le poder del Espíritu Santo. Este es pues un tema fundamental para el hijo de Dios…   

EL ESPÍRITU SANTO EN MI VIDA 

Nos unge para servir a Dios (Lucas 2:25 y 29). 

“Y he aquí había en Jerusalén un hombre llamado Simeón, y este hombre, justo y piadoso, esperaba la consolación de Israel; y el Espíritu Santo estaba sobre él…  Señor, ahora despides a tu siervo en paz, conforme a tu palabra”

Comentario 1: Dios mismo nos ha equipado para servirle, nos ha dado su Espíritu Santo. En éste caso la Biblia nos habla de un hombre llamado Simeón. Vivía en Jerusalén y se destacan aquí varias virtudes de él:

Justo: recto, íntegro, honesto.  

Piadoso: temeroso de Dios, consagrado.

Esperaba la consolación de Israel: Simeón confiaba en las promesas mesiánicas y por eso esperaba el consuelo de Dios para su pueblo. 

El Espíritu Santo estaba sobre él: esto hace referencia al poder del Espíritu que reposaba sobre Simeón.  

 

Comentario 2: La biblia nos enseña tres niveles de acción del Espíritu Santo en el cristiano: en, con y sobre. En nos habla de su obra interna, con nos habla de su papel como Consolador (uno que está al lado para ayudar), y sobre nos habla de la unción o equipamiento para servir eficazmente al Señor. Por tanto Simeón era un hombre ungido por el Espíritu Santo para servir a Dios.   

     

El Espíritu Santo revela los planes de Dios (Lucas 2:26)

“Y le había sido revelado por el Espíritu Santo, que no vería la muerte antes que viese al Cristo del Señor.”

Comentario 1: A lo largo de toda la Biblia vemos a Dios llamando continuamente al hombre para crecer y fortalecer la relación con él. Un buen noviazgo determina un buen matrimonio mañana; la iglesia será la esposa del Cordero, por tanto es vital fortalecer la intimidad con el Señor desde ahora.

Comentario 2: En éste nuevo tiempo Dios ha enviado su Espíritu Santo y cuando crecemos en la relación con él, recibimos revelaciones maravillosas de sus planes y objetivos. Simeón recibió del Espíritu Santo la revelación de que no moriría sin ver al Ungido del Señor. La palabra revelar significa quitar el velo, dejar al descubierto algo que estaba oculto.

Comentario 3: Es muy importante aquí destacar el significado del nombre Simeón. Significa: el que oye, el que obedece, uno que es escuchado. Palabras que destacan su sensibilidad a la voz y guianza del Espíritu Santo, resaltan su corazón sensible y obediente (opuesto al corazón duro y rebelde); además nos deja ver el resultado: él era escuchado por Dios.

Precisamente el Señor conocía ese anhelo por la consolación de Israel en su corazón y le permitió ver y cargar en sus brazos al Ungido del Señor.

Comentario 4: La palabra Ungido se traduce aquí del griego: “Cristos” que también se traduce Mesías. Cristo es el Ungido porque es el Mesías, es decir aquel rey libertador enviado por Dios y esperado por Israel. 

El Ungido es Cristo, vive en ti y además te ha sido dado el Espíritu Santo, eres por lo menos dos veces ungido, has recibido la capacidad para ser libre, caminar en victoria y servir a Dios con eficiencia.  

Conclusión: Todo lo que Dios hace lo hace con propósito. Nada es accidental, nos ha escogido para salvación y además nos ha equipado con su poder y unción para cumplir sus planes aquí en la tierra. Los dones y la unción del Espíritu Santo nos han sido dados para ser instrumentos poderosos en las manos de Dios.

Escrito por Pastor Gonzalo Sanabria.

Te invitamos a leer: “NO RENUNCIES AL LLAMADO DE DIOS”.         

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- El Espíritu Santo en mi vida -  Salmo 89:20-24 “He hallado a David Mi siervo; Lo he ungido con Mi óleo santo, Y con él estará siempre Mi mano; Mi brazo también lo fortalecerá. No lo engañará el enemigo, Ni lo afligirá el hijo de maldad. Sino que Yo aplastaré a sus adversarios delante de él, Y heriré a los que lo aborrecen. Con él estarán Mi fidelidad y Mi misericordia, Y en Mi nombre será exaltado su poder”.