La Obra de Dios en Nosotros

Introducción: (La obra de Dios en nosotros) Es difícil dañar o quebrar una cerámica única y especial. No sólo será costoso sino tal vez irreparable. El Señor Jesús tiene el poder de tomar una vida hecha pedazos y hacerla de nuevo. 

La obra de Dios en nosotros es maravillosa y sobrenatural, por eso a veces no la podemos entender, pero sin duda estar en Sus manos es lo mejor…      

La obra de Dios en nosotros: 

1) El Padre tiene herencia para sus hijos, Lucas 15:11-12.    

Comentario 1: El Señor Jesús enseña a través de una parábola el amor y la obra de Dios. Vemos aquí que el hijo menor quiere irse de la casa y usar su herencia según su propio criterio. 

Es de anotar que era “joven” lo que nos permite concluir que esto fue el resultado de su ímpetu natural, pues aún no tenía la experiencia y madurez para emprender un camino por sí mismo. Lo hizo llevado por su autosuficiencia.      

Comentario 2: El padre le entregó la parte de los bienes que le correspondía. Quizá el hijo menor sentía vergüenza por su papá, tal vez pensó que estaba sometido a un yugo y quería ser libre, independiente y tomar sus propias decisiones sin tener a quien dar cuenta. 

Nosotros hemos recibido una poderosa herencia en Cristo, él nos ha bendecido con muchos bienes: la salvación, el Espíritu Santo, su palabra, nuestra familia y todas las demás cosas… una pregunta para reflexionar aquí es: ¿Cómo estamos administrando lo que Dios nos ha dado?

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 2) La mala administración produce grandes pérdidas, Lucas 15:13.  

Comentario 1: Era tal el deseo del hijo de partir y desarrollar su propio proyecto de vida, lejos de su padre, que “no muchos días después se fue” a una provincia apartada. Allí desperdició sus bienes viviendo perdidamente, él se fue lejos para darle rienda suelta a los deseos de su propio corazón.     

Comentario 2: El hijo comenzó a sufrir pero más sufría el padre. El hijo perdió los bienes, el padre perdió un hijo. La palabra perdidamente es una traducción del griego: “asotos” que significa también: disolución, libertinaje, desorden, inmoral. Lo que nos permite ver que seguramente fue presa del vino, las mujeres, fiestas y desordenes, juegos de azar y todo negocio ilícito que le prometía dinero rápido.      

3) La abundancia no es segura, sólo en Dios podemos confiar plenamente. Lucas 15:14-16.     

Comentario 1: Los males son costosos, pues “todo lo malgastó”. Su padre había trabajado toda la vida y con esfuerzo había hecho un patrimonio y ahora en poco tiempo el joven hijo se había malgastado toda su parte. 

La Biblia nos dice: “Una gran hambre vino a aquella provincia” región o ciudad en la que había desorden, libertinaje e inmoralidad, y el juicio no se hizo esperar, los cielos se cerraron y no hubo comida. La mala administración de los dones o bendiciones de Dios resulta en escasez o miseria.

Comentario 2: El joven hijo fue a buscar trabajo para poder comer. Había un ciudadano en aquella tierra quien por el texto bíblico podemos concluir tenía casa, una hacienda, trabajadores y cerdos en cantidad. Él había sido mejor administrador de lo que a sus manos había llegado por voluntad de Dios.          

Comentario 3: Podemos recordar aquí que el Señor Jesús dijo: “¿Que aprovechará al hombre, si ganare todo el mundo, y perdiere su alma? Seguramente el joven pensó que tenía mejor juicio que su papá y a través de sus negocios prosperaría mucho más. Pero alejarse de su padre casi le cuesta todo. 

Alejarse del Padre celestial es exponernos al peligro de los ladrones en el camino y es salirnos de la cobertura o protección de Dios permitiendo al enemigo destruir sin piedad.

Comentario 4: La humillación es una herramienta para derribar el orgullo, y promueve la reflexión. Notemos que él deseaba comer el alimento de los cerdos “pero nadie le daba” las algarrobas estaban reservadas para dar de comer a los cerdos, es decir éstos animales se estaban alimentando mejor que él. Su orgullo y autosuficiencia habían caído, y en un estado de impotencia reflexiona.     

Te invitamos a leer el interesante estudio: LA VIDA DE JESÚS (Cristología). 

     

4) Es necesario reflexionar en nuestra condición y tomar decisiones correctas, Lucas 15:17-19.

Comentario 1: La frase “volviendo en sí” nos deja ver que él había perdido el buen juicio. Él reaccionó, había estado como ciego, impulsado por su autosuficiencia no logró ver que había empezado el camino más difícil y costoso. 

Recordó que aún los trabajadores de su padre estaban mucho mejor que él, con techo, una cómoda cama, abundancia de pan y un excelente jefe, mientras que él estaba muriendo de hambre.    

Comentario 2: Él decide volver a la casa de su papá, reconoce que ha pecado contra Dios y contra su padre y vuelve solicitando que al menos lo deje ser un trabajador más, que por lo menos puede recibir los beneficios de uno de sus jornaleros. 

Vemos entonces la importancia de hacer pausas en nuestra vida, reflexionar y corregir, y allí siempre estará el Señor para ayudarnos. La obra de Dios en nosotros es maravillosa.  

5) Dios es Padre restaurador, Lucas 15:20.  

Comentario 1: Consideremos las acciones del padre:

a) Su padre lo vio de lejos (seguramente lo estaba esperando, tal vez cada mañana se levantaba a mirar el horizonte porque él sabía que su hijo era joven, que cometería errores y que volvería, no se fue tras él porque era necesario que viviera su proceso),

b) Su padre fue movido a misericordia (la misericordia es la compasión por la miseria de otro. El joven hijo venía sucio, con harapos, su cabello y su posible barba estaban sucios, sin un solo peso de la herencia, pero su padre no lo criticó ni lo rechazó, sino que se compadeció de su miserable condición).

c) El padre corrió, lo abrazó y lo beso (Quizá el joven hijo esperaba un llamado de atención, o un “te lo dije”, o un recibimiento con condiciones, pero lo que recibió fue amor). Ante esto su hijo expresa su arrepentimiento: Lucas 15:21.  

d) El padre ordena bendiciones para su hijo, Lucas 15:22-24. El padre perdona pero no se queda allí solamente, él restaura la condición de aquel que viene a él: mando a ponerle el mejor vestido, también ordenó que le pusieran un anillo en su mano (lo que indicaba que volvía a tener derecho en la herencia familiar) y calzado en sus pies (tal vez no tenía calzado, sus pies sucios y maltratados por la larga caminata ahora serían lavados con agua tibia y con perfumes)

e) Hubo fiesta en la casa del padre porque su hijo que se había perdido había revivido. Recordemos que la misma Escritura nos dice: “Hay fiesta en los cielos cuando un pecador se arrepiente”.            

Reflexión final: Dios te ama y ha hecho todo lo posible por ti, envió su Espíritu Santo y te ha guardado cada día. Si dio a su Hijo ¿qué no hará por ti? Con fe depositemos nuestro corazón en las manos del Señor, la obra de Dios en nosotros es maravillosa.    

Escrito por Pastor Gonzalo Sanabria. – La obra de Dios en nosotros -

Te invitamos a leer: “EL DESTIERRO DEL APÓSTOL JUAN EN LA ISLA DE PATMOS”.      

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