LA PERSONALIDAD DEL ESPÍRITU SANTO
Introducción: La Pneumatología es el estudio de la doctrina del Espíritu
Santo desde las Sagradas Escrituras, su personalidad, divinidad, su obra en el
A.T. y N.T., significado de sus nombres y símbolos, su obra en Cristo y en la
iglesia, el bautismo en el Espíritu Santo, el hablar en lenguas, los nueve
dones y su fruto…
Recordemos que cuando Pablo llegó a Efeso, le preguntó a los discípulos: “¿Recibisteis el Espíritu Santo cuando creísteis? Ellos dijeron: Ni siquiera habíamos oído que hubiera Espíritu Santo”. Es fundamental conocer al Espíritu Santo...
Recordemos que cuando Pablo llegó a Efeso, le preguntó a los discípulos: “¿Recibisteis el Espíritu Santo cuando creísteis? Ellos dijeron: Ni siquiera habíamos oído que hubiera Espíritu Santo”. Es fundamental conocer al Espíritu Santo...
LA PERSONALIDAD
DEL ESPÍRITU SANTO
I. En el
desarrollo de la historia, han surgido enseñanzas heréticas contra Dios Padre,
contra Dios Hijo, y contra Dios Espíritu Santo.
Nota: La iglesia en sus diferentes momentos declaró como
herejía las enseñanzas de los Arrianos (Arrio: enseñó que Jesús no es Dios), y
de los Sabelianos (Doctrina enseñada por Sabelio, quien enseñó que Dios no es
trino, esto fue calificado como herejía en el año tercero D.C.) quienes
rechazaron o ignoraron la personalidad del Espíritu
Santo.
II. "Personalidad"
no es el cuerpo físico. La verdadera "persona" es el espíritu dentro
del cuerpo.
Nota 1: El compuesto de ojos, manos, pies, oídos, y
demás órganos y miembros es el cuerpo (La corporeidad es la condición de ser
cuerpo. Pero personalidad no implica corporeidad, ni viceversa. Por ej: los
demonios son personas, pero no tiene cuerpo).
Nota 2: El Espíritu Santo es una persona; pero Él es un Espíritu
que no posee un cuerpo físico. No es necesario que el Espíritu Santo tenga un
cuerpo físico como nosotros para ser una Persona. Los
elementos esenciales de la personalidad
son cuatro:
a) Intelecto:
Poder de pensamiento. 1ª Corintios 2.10-13; Juan 14.26.
b) Sensibilidad:
Poder de sentir las cosas. Romanos 15.30.
c) Voluntad: Poder
de hacer según nuestro deseo. 1ª Corintios12.11.
d) Conciencia
moral: Conocer el bien y el mal. Juan 16.9; Juan 16.13.
III. El Espíritu
Santo tiene un oficio que demanda una personalidad: Consolador, Juan 14:16-17.
Nota: Fue Cristo
mismo quien designo el oficio básico principal del Espíritu Santo: CONSOLADOR. La
palabra CONSOLADOR significa: instructor, guía, abogado, uno que comparte, uno
que da consejo, gobernador, asistente ayudante o cuidador.
En las Escrituras, solamente el Señor Jesús usó la palabra CONSOLADOR para describir el oficio del Espíritu Santo. Implicó con esto que el Espíritu Santo habría de ser para los creyentes, lo que Él había sido para sus discípulos aquí en la tierra. Otros oficios incluyen el de: Autor, 2ª Timoteo 3.16; Maestro y guía, Juan 14.26; Testigo de Cristo, Juan 15.26; y el de Creador, Salmo 104.30.
En las Escrituras, solamente el Señor Jesús usó la palabra CONSOLADOR para describir el oficio del Espíritu Santo. Implicó con esto que el Espíritu Santo habría de ser para los creyentes, lo que Él había sido para sus discípulos aquí en la tierra. Otros oficios incluyen el de: Autor, 2ª Timoteo 3.16; Maestro y guía, Juan 14.26; Testigo de Cristo, Juan 15.26; y el de Creador, Salmo 104.30.
IV. El Señor Jesús
habló del Espíritu Santo como el CONSOLADOR, pues esta palabra permite el uso
de un pronombre personal masculino.
Nota: En el capítulo
16:8, 14 de San Juan el pronombre personal masculino griego "ekeinos" es usado dos veces en
referencia al Espíritu Santo, veamos por ejemplo: vrs 14, “ekeinos doxázo eme”
= él me glorificará (los pronombres personales del sujeto en el español son: Yo, Tú Él, Ella,
Usted, Nosotros/as, Vosotros/as, Ustedes y Ellos/as.
Usamos los pronombres personales sujeto para referirnos a la persona que está haciendo la acción del verbo o de la que el verbo está hablando).
Usamos los pronombres personales sujeto para referirnos a la persona que está haciendo la acción del verbo o de la que el verbo está hablando).
V. El Espíritu Santo es identificado con
otras personalidades:
Nota 1: El hecho de que
el Espíritu Santo es una persona de la santa trinidad es prueba notable de Su
personalidad. Esto se ve por ejemplo en la fórmula del bautismo y en las
bendiciones de la Biblia, Mateo 28.19 y 2ª Corintios 13.14.
Nota 2: El Espíritu
Santo se identifica con los creyentes al hacer decisiones personales, Hechos
15.28. Aun cuando el Espíritu Santo manifiesta su poder, sin embargo no es
meramente un poder mecánico, ni inanimado. Las Escrituras hacen una distinción
entre el Espíritu y Su poder, Hechos 10.38 y 1ª Corintios 2.4.
VI. Hechos
personales desarrollados por el Espíritu Santo:
a) "Todo lo
escudriña, aún lo profundo de Dios". 1ª Corintios 2.10.
Nota: Escudriñar desde el griego “eraunáo” significa: buscar,
investigar, examinar. Es una obra de una persona, esto no lo puede hacer una
fuerza o manifestación, pues demanda una labor intelectual y voluntaria.
b) El Espíritu
Santo habla. Hechos 13.2; 21.11, 1ª Timoteo 4.1.
c) El Espíritu
Santo intercede por nosotros. Romanos 8.26.
d) El Espíritu
Santo nos enseña. Juan 14.26, Nehemías 9.20.
e) El Espíritu
Santo nos guía. Hechos 16.6, Romanos 8.14.
f) El Espíritu
Santo testifica. Juan 15.26.
g) El Espíritu
Santo participa o tiene comunión. 2ª Corintios 13.14.
h) El Espíritu
Santo llama y designa. Hechos 20.28.
Nota: Estos pasajes
muestran operaciones personales del Espíritu, tales como: hablar, dirigir y
guiar, enseñar y dar convicción, “él imparte los dones como él quiere” y todo
esto solo puede ser adscripto a una persona.
VII. El Espíritu Santo es susceptible al
tratamiento personal.
Nota: El Espíritu
Santo en sí mismo es una persona divina, distinta, viviente, poderosa e
inteligente. No es meramente una bendición, un sentimiento, una influencia o
fuerza procedente de Dios. Él está presente para usar al creyente como canal
divino, y de llevar a cabo la obra del Reino sobre la tierra.
Como persona, Él es bondadoso y sabio, y digno de la confianza y rendición total del creyente. El Espíritu Santo hoy día busca ser para los creyentes lo que Cristo fue para sus discípulos, cuando anduvo sobre la tierra.
Como persona, Él es bondadoso y sabio, y digno de la confianza y rendición total del creyente. El Espíritu Santo hoy día busca ser para los creyentes lo que Cristo fue para sus discípulos, cuando anduvo sobre la tierra.
VIII. El Espíritu
Santo puede ser afectado por las acciones de las personas, al igual que
cualquier otra persona.
a) El Espíritu
Santo es contristado. Efesios 4:30 (Contristar del griego “Lupeo” que además
significa: entristecer, afligir, angustiar).
b) El Espíritu
Santo puede enojarse. Isaías 63:10 (Enojo del Hebreo “Atsáb” que también
traduce: enojar, dolor, dañar, pesar, entristecer).
c) El Espíritu
Santo es resistido. Hechos 7:51 (Resistir del griego “antipípto” que significa además:
oponerse, resistir).
d) Al Espíritu Santo
se le puede mentir. Hechos 5:3 (Mentir del griego “pseudomai” que también
traduce: pronunciar una falsedad, intentar engañar).
e) El Espíritu
Santo es blasfemado. Mateo 12:31-32. (Del griego “blasfemía” que también quiere
decir: maldición, forma de hablar injuriosa, ultrajante y calumniante).
f) El Espíritu Santo puede ser apagado. 1ª Tesalonicenses 5:19
(Apagar del griego “sbénnumi” que también significa: extinguir, apagar fuego o
cosas incendiadas, dificultar las operaciones del Espíritu).
Conclusión: El Espíritu
Santo es una persona, él es Dios. Es fundamental en nuestra vida cristiana ser
conscientes de esto, pues él vive en nosotros y ha venido para ser nuestro
Consolador, para guiarnos, enseñarnos y ayudarnos a hacer la voluntad del Padre
celestial.
Escrito por Pastor Gonzalo Sanabria.
Te invitamos a leer: “LA LIBERACIÓN DEL ENDEMONIADO GADARENO”.
Excelente estudio!!! Bendicionnes!!!
ResponderBorrarMuchas gracias Alicia por dejarnos tu comentario. Dios te bendiga.
BorrarGracias por la información no muchos hablan acerca del Espíritu Santo y en ocasiones no entendemos la importancia de esto temas
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