CIELOS ABIERTOS PARA TI

Introducción: (Cielos abiertos para ti) En la Biblia la expresión “cielos cerrados” indica ausencia de bendición y de respaldo de Dios. Generalmente se presentaban sequías y hasta los animales morían de sed y hambre. 

Cuando Jesús se bautizó, dice la Biblia “y orando el cielo se abrió y descendió el Espíritu Santo”. Cuando los cielos se abren cosas poderosas suceden. Dios quiere abrir las ventanas de los cielos y derramar sus bendiciones. Veamos este importante estudio

 

CIELOS ABIERTOS PARA TI Y PARA TU FAMILIA

I. LA OBEDIENCIA PRECEDE LA ACCIÓN DE DIOS     

a) Obedecer a Dios requiere valentía (1 Reyes 17:1)

Nota: Elías le habló al rey de Israel declarando el juicio que venía sobre Israel. Lo hizo sin temor, pues Dios lo había enviado. Debemos tener en cuenta que los cielos se cierran por el pecado de Acab y de Israel: 1 reyes 16:30-33.

Jezabel reinó en Israel, Jezabel es sinónimo de: problemas con o en la autoridad, es sinónimo de inmoralidad sexual, de rebelión, de idolatría, de hechicería y matriarcado. La valentía de Elías contrastaba con la debilidad del Acab, pues el rey permitió las obras de Jezabel en todo Israel.  

b) Elías decide obedecer los mandamientos de Dios (1 Reyes 17:2-3, 5).        

Nota: Dios da a Elías tres instrucciones, Dios requiere la obediencia de sus hijos. Dios le dice:

1) “Apártate de aquí” (hoy día Dios sigue diciendo esto mismo, es decir debemos alejarnos de lo malo).

2) “Vuélvete al oriente” (dar la vuelta, iniciar un nuevo camino. Oriente es la traducción de un término hebreo que también traduce: antes de, principio, antiguo… es como volverse al camino de antes, dar la espalda al camino que parece bueno, pero su fin es de muerte).

3) “Escóndete en el arroyo de Querit” (el agua es símbolo de la palabra y del Espíritu, es pues un ámbito o lugar de refugio y cobertura. El término Querit significa: corte. Viene de una raíz hebrea que significa: cortar, separar, destruir, talar. Hablamos entonces de un lugar donde no sólo Elías estaría escondido, sino también de un lugar de aprendizaje).  

c) La obediencia es una atmósfera de milagros (1 Reyes 17:4)

Nota 1: Dios promete a Elías su cuidado sobrenatural… Pero es Elías quien debe obedecer. Elías llegó al arroyo de Querit, y su obediencia permitió el milagro: 1 Reyes 17:6. El cuervo es carnívoro, de pico fuerte, plumaje negro, son comilones ansiosos. Es paradójico, pero Dios es Todopoderoso, él tiene cuidado de sus hijos. Es Dios quien abre los cielos. 

   

Nota 2: Nuestro corazón debe mantener su adoración a Dios aunque nos ocurran cosas que no esperamos o entendemos: 1 Reyes 17:7 (Elías estaba obedeciendo a Dios, estaba en el lugar indicado, tal vez ya cómodo, esperaba estar allí tres años y medio. 

Pero Dios tenía otros planes, él continuaba enseñándole a Elías acerca de su poder y cuidado, pues ahora lo alimentaría a través de una viuda en Sarepta de Sidón, una gentil de escasos recursos…).  

II.  ACCIONES QUE ABREN LOS CIELOS:  

a) Restaura el altar (1 Reyes 18:30).   

Nota: El altar de Jehová estaba arruinado, descuidado, lleno de polvo, viejas cenizas, y telarañas, era un altar que no habían vuelto a usar. Así estaba la vida espiritual de Israel… Fue en éste momento cuando Elías derramó sobre el altar 12 cantaros de agua: 1 Reyes 18:34-35.

Dios puede pedirnos cosas difíciles… pero será para mostrar una mayor gloria: pues el fuego de Dios descendió y consumió todo el sacrificio y toda el agua derramada. Vuélvete al altar, pues la gloria de Dios se manifestará con poder.       

b) Busca a Dios con insistencia (1 Reyes 18:42-43).  

Nota: Elías era un hombre de oración. Al comienzo de su proceso de oración no hubo respuesta del cielo, el criado le decía “no hay nada”. Elías le dijo: “Vuelve siete veces”, pues el número siete significa lo completo, lo integro. 

Es como si Elías dijera: “orare hasta completar la medida que Dios tiene destinada para que los cielos se abran” (cuantas veces orando hemos oído decir: “no hay nada”, “no ha ocurrido nada” o “todo está más difícil”, pero la respuesta no es dejar de orar, sino perseverar, pues al final cielos abiertos habrán).       

(Te invito a leer: Sermones escritos para predicar).

c) Créele a Dios (1 Reyes 18:44-45).   

Nota 1: Dios secó el arroyo para enseñarle a Elías a orar por lluvia (pues Elías no oraría por lluvia con el arroyo fluyendo).

Nota 2: Dios también permite las crisis para usarte como bendición para otros. Porque el arroyo era para Elías, pero la lluvia es para todos.

Nota 3: Las pequeñas señales son evidencia de la gran bendición que viene, “veo una pequeña nube”. Ej: el esposo(a) incrédulo(a) que te dice: “éste domingo te acompaño a la iglesia”. El hijo que no te acompaña, pero te dice: “ora por mí, necesito que Dios me ayude”…

Nota 4: Cuando los cielos están abiertos sobre ti, cosas sobrenaturales empiezan a ocurrir: 1 Reyes 18:45-46. 

La versión NVI: “Entonces el poder del Señor vino sobre Elías, quien ajustándose el manto con el cinturón,  echó a correr y llegó a Jezrel antes que Acab”, el Espíritu Santo vino sobre Elías y le dio tales fuerzas para correr que llegó antes que el rey Acab, el cual venía en un carro halado por caballos, como cuando el Espíritu vino sobre Sansón e hizo pedazos al león, porque cuando los cielos se abren sobre ti, sobre tu casa, cosas sobrenaturales empiezan a ocurrir…      

Conclusión: Dios ha planeado lo mejor para sus hijos, a veces por los errores cometidos, o por desobedecer a Dios los cielos se nos cierran, y las cosas se pone muy difíciles. Pero lo que debemos hacer es volvernos a Dios, buscar su protección y dirección, no dejar de perseverar ni de buscarlo, pues al final él en su amor y  misericordia abrirá los cielos para ti. Hay cielos abiertos para ti.   

Escrito por Pastor Gonzalo Sanabria.

Te invitamos a leer el siguiente devocional en español: Sermones escritos para predicar.

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Cielos abiertos para ti.