ESTRATEGIA Y VICTORIA DE NEHEMÍAS

(Pastores Gonzalo y Andrea Sanabria)

Aunque estemos haciendo la voluntad de Dios, no estamos exentos de enfrentar gran oposición. Ante esto, nuestras reacciones pueden ser diversas, podemos enojarnos, huir, desanimarnos, o tomar una actitud espiritual y madura, como hijos de Dios y personas de fe. 

Vemos en el estudio de hoy que Nehemías está reconstruyendo los muros de Jerusalén, y sus enemigos levantan calumnias y mentiras, él opta por orar en primer lugar, y esto expresa nuestra dependencia de Dios y confianza en él. Confía en Dios, él no te fallará...




ESTRATEGIA Y VICTORIA DE NEHEMÍAS       

Oye, oh Dios nuestro, que somos objeto de su menosprecio”, Nehemías 4:4.

El pasaje nos enseña que no debemos discutir o entablar un enfrentamiento con las personas (o enemigos) por las burlas o calumnias que hagan, sino más bien, hablar con Dios, orar confiados en su poder (en algunas ocasiones el arma es además el dialogo en amor, pero debemos tener la sabiduría para hacerlo). 

Lo que tú hagas al respecto, sin la dirección divina, nunca será mejor, que lo que Dios puede hacer. Por eso lo primero que debemos hacer es orar, y seguir la dirección del Señor.  

No subestimes la oposición. Al considerar lo que Nehemías hizo, nos enseña que no debemos ignorar las maquinaciones del enemigo, sino velar en oración y sabiduría: “Entonces oramos a nuestro Dios, y por causa de ellos pusimos guarda contra ellos de día y de noche”, Neh. 4:9. 

Ellos oraron y actuaron, algo así como: “Señor protégenos está noche… pero nosotros cerraremos las puertas”. Oración sin acción es pasividad religiosa. 

Refuerza los puntos débiles, “Entonces por las partes bajas del lugar, detrás del muro, y en los sitios abiertos, puse al pueblo por familias, con sus espadas, con sus lanzas y con sus arcos”, Neh. 4:13. 




Nehemías identificó los lugares vulnerables (“las partes bajas y los sitios abiertos”) y los reforzó. ¿Cuáles son esos lugares hoy? Podemos ver algunas aplicaciones devocionales desde los términos hebreos usados:

Partes bajas: del hebreo Takjtí: lo de más abajo; profundidades (figurativamente abismo). Es aquello que no está a la vista, está escondido, pero actúa y/o permite la acción desde las profundidades infernales.
 
Sitios abiertos: del Hebreo Tsekjiákj: Expuesto, desprotegido. Es aquello por lo cual no nos preocupamos, y por tanto no cubrimos (Por ej: padres tan ocupados que descuidan a sus hijos; esposos(as) que descuidan a su cónyuge, etc). Usemos con sabiduría la armadura de Dios

Niégate a abandonar tu comisión divina, Neh. 4:21-23. La oposición, las crisis, las dudas, los mensajes demoniacos de abandonar la obra del Señor, son parte del camino del cristiano, pues finalmente lo que el diablo quiere e intenta una y otra vez, es apartar y mantener inactivos a los soldados del reino de Dios. Pero, como Nehemías debemos tomar fuerzas en Dios y perseverar, al final veremos la victoria en el Señor.




Reflexión final: Dios no desampara a su pueblo, él está siempre a su favor. Lo que el Señor requiere es fidelidad y perseverancia, cuando el hijo de Dios avanza sin temor y confiado en las promesas del Señor, no será avergonzado. Avanza, Dios está contigo.

Te invitamos a leer:
3.   DIOS NO MIENTE 
                                                                                            


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