CUANDO DIOS TE SORPRENDE

Dios no se había olvidado de Zacarías y Elisabet (padres de Juan el bautista), el Señor tenía un gran plan preparado para ellos, y a su debido tiempo se cumpliría. Por eso aunque transcurra el tiempo no debemos desmayar, pues Dios sabe lo que hace. 

Recordemos que ellos se casaron esperando como es normal tener hijos, pero Elisabet era estéril, y comenzaron a orar creyendo en un milagro, pero transcurrió el tiempo y el hijo no llego. El Señor envió su ángel y respuesta en Su tiempo, porque Dios es bueno y fiel…

CUANDO DIOS TE SORPRENDE

“Y se le apareció un ángel del Señor puesto en pie a la derecha del altar del incienso. Y se turbó Zacarías al verle, y le sobrecogió temor” Lucas 1:11-12.

La Biblia nos deja ver que Zacarías ya había olvidado el tema, o por lo menos ya no esperaba ese milagro, como podemos ver han pasado décadas, ellos ahora son ancianos, y probablemente esperan terminar sus vidas siguiendo a Dios, pero sin ver un hijo de ellos.

Es significativo el lugar del ángel “a la derecha del altar del incienso”, porque es un mensaje de Dios, recordándonos  que no debemos abandonar nuestra adoración (el incienso es figura de adoración), representa nuestra comunión con él, aunque no haya respuesta le seguimos amando, y sólo debemos perseverar porque llegará el día de su respuesta. 

El “lado derecho” en la Escritura indica honor y poder, Zacarías estaba siendo honrado y fortalecido con el poder de Dios, así como Jesús fue visitado por un ángel para fortalecerlo en el huerto de Getsemaní antes de ir a dar su vida en la cruz. 

Aunque Dios esté en silencio, él está actuando a nuestro favor. Algunas veces Dios calla por amor, otras veces lo hace para edificar nuestra fe en él, en otras ocasiones para probar nuestro compromiso y madurez, y otras veces no quiere que lo escuchemos, sino que lo veamos. Dios actúa de diversas maneras y nuestro corazón debe ser sensible a su obra.

Algo es seguro: La obra de Dios produce gozo y alegría, Lucas 1:13-14, “Pero el ángel le dijo: Zacarías, no temas; porque tu oración ha sido oída, y tu mujer Elisabet te dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Juan. Y tendrás gozo y alegría, y muchos se regocijarán de su nacimiento”. 

Al comienzo la obra de Dios puede ser difícil de comprender para nosotros, y quizá nos molesta lo que ocurre, pero el Señor tiene el dominio de todas las cosas, y por eso le dice a Zacarías: “no temas”. No temas, Dios está al mando y sabe lo que hace.

Debemos tener presente que no es en nuestro tiempo, sino en el tiempo del Señor, y entonces es cuando viene lo mejor de Dios para nosotros, no será lo que queremos sino lo que el Padre trae en su perfecto y gran amor, pues en éste caso no sería cualquier niño, sería un gran profeta, del cual el mismo Señor Jesús dijo: 

“Os digo que entre los nacidos de mujeres, no hay mayor profeta que Juan el Bautista”, Lucas 7:28.” Dios entonces hizo un milagro sanó la matriz de Elizabet, y le dio la fuerza para concebir y dar a luz, a pesar de su avanzada edad, porque no hay nada imposible para Dios.

Por muchos años éste matrimonio fue señalado, rechazado y juzgado (recordemos que para los judíos no tener hijos era señal de maldición y juicio por un pecado oculto), pero ahora todos sus familiares, vecinos y amigos hablaban de ellos porque el Señor los había visitado, además el nombre de su hijo: Juan significa: “Jehová ha hecho gracia”.

También dice la Escritura: “y tendrás gozo y alegría”, estas palabras traducen también: deleite, regocijo, júbilo, gozo exuberante, gran alegría. 

La profecía del ángel Gabriel fue la semilla de Dios para Zacarías y Elizabeth, y un tiempo después nació Juan, razón de un gozo y alegría que nunca habían tenido; hoy Dios está depositando o sembrando en tu corazón una semilla de bendición y de aquí a un tiempo llegará la razón de tu gozo y tu alegría, no desmayes la respuesta de Dios viene para tu vida.

Reflexión final: Recuerda sé obediente a Dios y persevera en medio de la adversidad, no abandones tu servicio a Dios, el Señor te sorprenderá con su respuesta y bendición, será en su tiempo, y será grande, porque ocurrirá en la voluntad perfecta de Dios. Él es bueno y fiel.

(Escrito por Pastor Gonzalo Sanabria)

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